La percepción visual es el mecanismo que permite procesar los estímulos visuales para identificar qué es lo que se ve y luego entender el mundo en que vivimos (Martin, 2006).
Este desarrollo se caracteriza por envolver tres modalidades de integración de la información:
- Las habilidades viso-espaciales,
- El análisis visual y
- La integración visomotora.
A su vez el análisis visual consta de siete sub-habilidades, las cuales representan la construcción teórica del concepto de percepción visual. Estas son:
- Discriminación visual: la habilidad de discriminar formas dominantes de objetos, por ejemplo: la habilidad de discriminar la posición, la forma, el contorno y el color.
- Constancia de forma: Aunque la imagen de los objetos que vemos está deformada por efecto de la perspectiva nuestra percepción asume que es el mismo objeto aunque su forma o tamaño varíe.
- Relación espacial: la habilidad de percibir las relaciones de los objetos en relación a ellos mismos u otros objetos (figuras al revés o rotadas).
- Memoria visual: la habilidad de reconocer el ítem de un estímulo después de un pequeño intervalo de tiempo.
- Memoria visosecuancial: recordad estímulos visuales en el orden en el que se presentaron
- Fondo-figura: la habilidad de identificar un objeto dentro de un fondo complejo o rodeado de figuras.
- Cerramiento visual: la habilidad de identificar una figura completa cuando solo se muestran fragmentos
El proceso en si...
En el caso de la percepción visual el proceso empieza en los ojos. La luz que llega a ellos estimula los fotoreceptores de la retina que convierten el estímulo lumínico en impulso eléctrico y lo transmiten, a través de los axones del nervio óptico, hacia el cerebro. La información se encuentra en la conexión cerebral llamada quiasma y continúa hasta llegar a una zona específica del tálamo (los núcleos geniculados laterales) desde donde es enviada al córtex visual situado en el lóbulo occipital. La información procedente del ojo derecho es enviada al córtex visual del hemisferio izquierdo y al revés.
Se puede dividir este proceso en tres etapas principales:
1) Fotorrecepción: la luz que llega al ojo, estimula en el fondo de la retina las células fotorreceptoras, que transmiten la señal al nervio óptico.
2) Transmisión y procesamiento: en la retina empieza un primer nivel de procesamiento que se irá haciendo complejo hasta llegar al tálamo y de éste al córtex cerebral.
Áreas del córtex visual, iniciación de la percepción.
La información de los impulsos electroquímicos simples, transmitidos inicialmente por el nervio óptico, se diversifica en formas más complejas al alcanzar el córtex cerebral. En éste, se produce un fraccionamiento de la información inicial en estímulos simples que se asocian, posteriormente, en estructuras superiores mediadas por el conjunto de la actividad mental. Más allá de los estímulos exteriores, de la mera recepción física, ver implica una actividad intelectiva, la relación y estructuración de los datos perceptuales con estructuras mentales, la capacidad de organizar y configurar la escenificación estable del espacio circundante.
Percepción y psicología.
Los teóricos de la Gestalt han usado 4 principios clave para
describir los procesos de percepción visual. Estos principios son:
• Emergencia: reconocimiento global de objetos, emergiendo formas percibidas
anteriormente de forma simultánea, no por la suma de sus partes
constitutivas.
• Reificación: construcción de nuevas formas partiendo de las existentes
gracias a la propia experiencia visual.
• Multiestabilidad: percepción ambigua entre fondo y figura que se dan en
algunas imágenes.
• Invariancia: prioridad en el reconocimiento y percepción de las formas y
contornos de los elementos por encima de otras cualidades: color, textura,
estilo.
Leyes de la visión
Mediante estudios experimentales, los autores de la Gestalt llegaron a determinar las llamadas Leyes de la visión, un conjunto de principios
descriptivos sobre el proceso de la percepción visual coherentes con la premisa
básica de que toda nuestra experiencia perceptiva está estructurada y posee una tendencia a unir y a relacionar en grupos los estímulos percibidos. Tal
como están formuladas las Leyes de la visión pretenden predecir cómo agruparemos
los diferentes estímulos en unidades en función de sus características
y relaciones.
La coordinación visomotriz
La estimulación de la coordinación visomotora es de gran importancia por su influencia para el desarrollo y dominio del cuerpo desde los más generales hasta aquellos movimientos de carácter fino como ser la escritura. Asimismo en la psicomotricidad esta manifestación hace referencia a la facilitación de ciertos patrones de conducta que serán de gran valor para el actuar diario, mediante la relación de la vista y el movimiento corporal en actuación simultánea.
- Coordinación ojo-mano. Mide la habilidad para dibujar líneas rectas o curvas con precisión de acuerdo a los límites visuales.
- Posición en el espacio. Considera la habilidad para igualar dos figuras de acuerdo a rasgos comunes.
- Copia. Implica la habilidad para reconocer los rasgos de un diseño y repetirlo a partir de un modelo.
- Figura-fondo. Mide la habilidad para ver figuras específicas cuando están ocultas en un fondo confuso y complejo.
- Relaciones espaciales. Se refiere a la habilidad para reproducir patrones presentados visualmente.
- Cierre visual. Mide la habilidad para reconocer una figura estimulo que ha sido dibujada de manera incompleta.
- Velocidad visomotora. Implica la rapidez con la que un niño puede trazar signos establecidos asociados a diferentes diseños.
- Constancia de forma. Mide la habilidad de reconocer figuras geométricas que se presentan en diferente tamaño, posición o sombreado.
Todas estas habilidades deben presentarse en los niños de manera correcta, pues su mala integración dará una anomalía en el desarrollo cognitivo del niño, estas habilidades deben ser conjuntas: es decir que deben relacionarse unas con otras ya que sin la anterior no se podrá presentar la siguiente.